“¡No reconozco esta corte odiada, es un invento de la OTAN, una corte satánica y no una corte de justicia!”, ha sido el único testimonio que prestó este martes el exlíder militar serbobosnio Ratko Mladić ante el Tribunal de La Haya.
“Nos está procesando por haber protegido nuestro propio pueblo de ustedes. Sus citaciones, sus tópicos, sus acusaciones falsas, ¡no me importa lo más mínimo nada de eso!”, añadió.El expresidente de la República Serbia de Bosnia, Radovan Karadžić, y su máximo comandante militar, Ratko Mladić, han comparecido juntos este 28 de enero ante el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia en La Haya, donde son procesados por crímenes de guerra. Es la primera vez que las dos figuras más poderosas de las guerras de Yugoslavia se encuentran después del fin del conflicto. Karadžić, sobre quien pesan 11 cargos, incluidas las acusaciones de genocidio, había solicitado el testimonio de Mladić. Argumentó que es “la única persona en todo el mundo que sabe mejor qué pasó durante la Guerra de Bosnia”.
En referencia a un documento firmado por Karadžić, la cadena BBC filtró que el expresidente de la República Serbia de Bosnia tenía planeado hacer a su mando militar un total de seis preguntas con el fin de obtener la confirmación de que las órdenes de cometer los crímenes de guerra no procedían de él. En un primer momento, Mladić se negó a prestar juramento. El tribunal no aceptó su negativa, pero puntualizó que tenía derecho a no contestar a las preguntas que no considerase oportunas. El exmilitar dio algunos detalles de su biografía, pero en cuanto Karadžić pasó a las preguntas más delicadas e inquirió: “¿Me ha informado alguna vez de que los prisioneros de Srebrenica serían ejecutados, estaban siendo ejecutados o habían sido ejecutados?” Mladić se acogió a su derecho a guardar silencio. El juez no le forzó a contestar, con lo cual la única declaración del día del general serbobosnio ha sido la calificación de “corte satánica” que hizo sobre la sala antes de dar comienzo a su testimonio formal.
Mladić, el jefe del Estado Mayor del Ejército de la República Srpska (VRS) durante la Guerra de Bosnia (1992-1995), fue detenido en mayo de 2011 en Serbia, donde había vivido sin ser identificado durante la mayoría de los 16 años que pasó fugado. Se le imputa el asedio de la capital de Bosnia, Sarajevo, durante casi cuatro años, que dejó más de 10.000 muertos, la limpieza étnica en Srebrenica, que acabó con todos los hombres musulmanes de la localidad, 8.100 en total, y la captura de un total de 284 cascos azules como rehenes en diferentes partes del territorio del país y su uso como escudos humanos entre mayo y junio de 1995 para prevenir los bombardeos de la OTAN. A Karadžić, detenido en julio de 2008 también en Serbia, se le acusa de haber orquestado estas operaciones. Ambos niegan su responsabilidad en los crímenes de lesa humanidad que se les atribuyen.
RT
No hay comentarios:
Publicar un comentario