sábado, 10 de julio de 2010

Aspectos Espirituales del Eclipse Total de Sol del 11 de julio de 2010


 alineacion2
“Un Eclipse Total de Sol está caracterizado por un rápido avance de la oscuridad en pleno día y la visibilidad de un oscuro disco solar rodeado
por una corona en el cielo espectral.
En este oscuro cielo, es posible ver todas las estrellas y planetas sobre el horizonte.”

“El eclipse del Sol no es privación de luz (porque nunca la pierde),
es sólo una ocultación de sus rayos”[i]

El conocimiento esotérico antiguo sostiene que cuando el sol
desaparece y la conexión con el cuerpo divino se interrumpe,
la gente esta sola con todos sus impulso inconscientes, distorsiones,
sus programas de Ego, y se quedan sin ninguna fuerza.

El Sol es nuestra estrella y en el plano espiritual es el transmisor del Plan Divino o Solar, llevado a cabo por las Jerarquías Solares, las cuales son una representación sintética de fuerzas y energías, necesarias para llevar adelante la evolución planetaria.

Las Jerarquías Solares tienen como función crear autoconciencia en todos los seres, lo cual se logra mediante la utilización conciente de la energía del amor y además otra función de esta inteligencias  es trasmitir la Voluntad del Logos planetario a los hombres.

El Sol, el sistemas Solar ( a través de Venus) y la vida en la tierra forman un triangulo de energías.

triangulo 1

Las energías del triangulo cósmico exterior de nuestro planeta, formado por Sirio, las Pléyades y Orión son transmitidas a la tierra a través del SOL.

trianguloII

Durante el eclipse mediante el juego de luz y sombra estas energías son moduladas.

Es por este motivo que por encima de todo los eclipses tienen una implicancia espiritual.

Dane Rudyar escribe en su libro The astrology of transformation (1980),
que cuando el Sol esta totalmente eclipsado, la luna absorbe toda la energía solar, y la tierra solo recibe el poder lunar.

La luna representa el principio de adaptación basado en la tradición y
los conocimientos adquiridos en el pasado, por lo que un eclipse de Sol
se puede interpretar como una “glorificación del pasado”.
Mientras que en un eclipse de Luna, el pasado es oscurecido por el presente (Tierra).

Podemos interpretar el pasado como pautas karmicas generadas a partir de acciones pasadas actuales, ancestrales o multidimensionales.
El tema es que en un eclipse por preponderancia o negación un poco de Karma se vera simbólicamente activado.

Una de las consecuencias espirituales de un eclipse de Sol, será que viviremos una nueva expresión de algún tema del pasado que estaba enterrado en nuestra conciencia.

Simbólicamente en un eclipse solar el lado oscuro de la luna se ve iluminado.
Así también ocurre en nosotros , la sombra o lado oscuro del alma debe
ser enfrentado e integrado a nuestra conciencia.

La Luna (nuestro pasado) se interpone entre el presente (la Tierra) y el futuro (el Sol).

Podemos quedar sumergidos en nuestra impotencia de cambiar los hechos del pasado y enojarnos por sus consecuencias o aprovechar esta oportunidad que el cielo nos ofrece para integrar aquello que es un obstáculo y está sin resolver, reconociendo nuestros patrones mentales que fueron ancestralmente instalados en nuestra conciencia, para poder elaborarlos y cambiar nuestra orientación en el flujo de la vida.

Liberarnos de condicionamientos y ataduras karmicas nos permitirá
avanzar y evolucionar , en un espiral de luz hacia el futuro.
Borrar las memorias del pasado de miedo y dolor del antiguo ego
y modular nuevas frecuencias para alcanzar las memorias lumínicas
de nuestro ego quántico es uno una de las misiones de la serie de eclipses hasta 2012.

Como es arriba es en nosotros, cuando el sol del ego y la personalidad se apaga y vemos quienes somos, que hemos hecho, solo nos queda mirar para arriba y ver el manto de estrellas que se eleva sobre el horizonte y sentirnos parte del universo, entonces todas esas pequeña luchas de poder en las que te desgastas desaparecen, eres parte de un gran todo.


Esta meditación fue otorgada por Solara An Ra del concilio pleyadiano con el propósito de fortalecer nuestra conexión con la rejilla electromagnética de Gaia así como con la rejilla de la conciencia cristica para anclar las próximas emanaciones de las transmisiones de la rejilla de los rayos cósmicos que específicamente serán dirigidos a cada ciclo de luna nueva y luna llena durante las próximas 12 semanas, comenzando con el eclipse solar de luna nueva el 11
de julio y a través del equinoccio de septiembre en luna llena, un punto
de inflexión donde la energia de nuestros corazones se activará
poderosamente, ayudándonos a recordar nuestra verdadera naturaleza
esencial así como también despertará a todos aquellos que aun dormitan.

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