domingo, 6 de noviembre de 2011

John Lash: Sobre Depredadores Arcónticos



Hace algún tiempo tuve el placer de conocer a John Lamb Lash, quien reside actualmente en la serranía de Málaga. Desde este lugar pueden contemplarse en el horizonte trazos del continente africano, vista que parece mantenerlo en contacto con los saberes ancestrales a los cuales ha dedicado una vida entera de trabajo, estudio y experimentación. John vivió de lleno la revolución psiquedélica de los años 60, y forma parte del pequeño grupo que siguió manteniendo encendido el fuego de la misma mientras el movimiento se disolvía irremediablemente.

Nos hallamos pues ante un sabio contemporáneo de la tribu psiquedélica, definido incluso por algunos como "el verdadero sucesor de Mircea Eliade". De naturaleza mística desde su más tierna infancia, se convirtió durante su juventud en uno de los astrólogos más cotizados de la época–formulando de hecho nuevas aproximaciones a esta ciencia maldita que pueden encontrarse en su libro "Quest for the Zodiac: The Cosmic Code Beyond Astrology". Sin embargo, dejó este camino para dedicarse al estudio del "misticismo experimental" con plantas sagradas, llevando a cabo diversos viajes–compartió andanzas con el polémico Carlos Castaneda–y combinando su experiencia con un impresionante volúmen de investigación académica independiente sobre una ingente multitud de materias que incluyen mitología comparativa, historia de las religiones, antropología, gnosticismo, chamanismo, enteógenos, alquimia, estudios esotéricos, ecofeminismo, o ecología profunda por nombrar unas pocas.


John considera que las ideas expresadas en su último libro "Not in his Image"–una reinterpretación de las antiguas tradiciones gnósticas–han sido el motor tras su búsqueda vital. La intención de quien escribe estas líneas era entrevistarle sobre estas ideas: la impresión que se llevó de Lash fue la de un hombre visiblemente cansado, desgastado por el peso de traer al mundo una vasta cosmología–radicalmente opuesta al sistema de creencias actual–y desilusionado por la dirección que está tomando la escena psiquedélica mayoritaria. John es consciente de que el cambio en los sistemas de creencias es algo que el 99% de las personas no desea, y en algún lugar ha expresado su sensación de estar "montando una fabulosa fiesta a la que nadie luego va a acudir"–podéis haceros una ligera idea de dicha fiesta consultando la guía de lectura de su denso sitio web, Metahistory.org.

John fue muy amable al dedicarme su tiempo y enseñarme cosas interesantes durante mis dos días de estancia allí, pero a su vez expresó su cansancio con el tema de las entrevistas. Así que, como quien escribe este vuestro blogs quería mantener el formato usado con anteriores conversaciones como la mantenida Drew Hempel o Jason Kephas, le propuse construir una entrevista sintetizando los numerosos diálogos que ha intercambiado con otras personas y que se hallan esparcidas por la red–sin decir por supuesto nada que no haya salido antes de su boca. 
Así que eso es exactamente lo que sigue a continuación; vale, es un poco fulero pero, ¿no hacía lo mismo con Sócrates aquel tipo de Atenas que os hacían estudiar en el instituto? Ah, amigos: tendréis que echarle algo de imaginación al tema–y este sea quizá el mensaje más importante de las enseñanzas de John.

Misticismo

Mierdakosmika: John, lo que te diferencia de otro autores que escriben sobre gnosticismo es que te defines como alguien que de hecho tiene experiencias místicas. ¿Podrías explicarnos algo más sobre esto?
John Lamb Lash: Bueno, quisiera dejar claro que no concibo que exista ningún tipo de autoridad en el misticismo, salvo la autoridad de la experiencia propia. Lo que quiero decir es que si yo hago afirmaciones sobre mis experiencias místicas, no espero que nadie me crea, ni que me siga de forma no crítica, ni mucho menos que se me considere una autoridad. Sí me gustaría ser calificado como alguien auténtico, o con una experiencia mística auténtica. Y esto es una paradoja, porque muchos de los autores que escriben sobre gnosticismo–que es un material de contenido altamente místico–o no son místicos o no admitirán que lo son. Esto es un handicap que oscurece el tema desde el primer momento.
En cuanto a mí diré que no he seguido formalmente ninguna práctica espiritual en mi vida. No medito. No me he unido a ningún grupo ocultista. Nunca he seguido a ningún gurú. Mi camino ha sido un camino privado, idiosincrático, consistente en un proceso de ensayo y error, cuestionamiento y exploración: básicamente he ido dando tumbos. Desde la edad de cuatro años he ido experimentando estados místicos de forma espontánea: sueños lúcidos, sacudidas de energía Kundalini, encuentros con fuerzas oscuras predatorias y desconcertantes zambullidas en el nagual. En mi vida adulta me han inspirado aventuras amorosas con mujeres. Me han pasado cosas extrañas y he tenido que trabajar sobre ellas, descubriendo tesoros ocultos en el proceso. Creo que soy como un tertón, alguien que según la tradición del Dogzchen encuentra tesoros. En gran medida, mi práctica ha consistido en mantenerme cuerdo–y con este currículum, puedes figurarte cual es mi definición de cordura.
MK: ¿Cual dirías que es la diferencia entre una experiencia mística y una simple alucinación? ¿Hay alguna forma de distinguir entre ambas cosas?
JLL: Creo que la diferencia es una cuestión epistemológica, y que tiene que ver con el refinamiento cognitivo. El camino del misticismo–y puedes intercambiar este término por el de chamanismo–es un proceso en el cual aprendemos a cultivar y a discernir nuestras percepciones tanto de los estados alterados de consciencia como de la realidad ordinaria. Así que tomando como ejemplo el uso de la ayahuasca, la única diferencia entre tener visiones ilusorias y experiencias místicas genuinas radica en la forma en que las manejas después, o en la relación que estableces con ellas.

¿Gnosticismo?

MK: Tu aproximación al Gnosticismo es se opone a la visión ofrecida por el mundo académico. ¿En qué difiere?
JLL: El problema es que la mayoría de autores que escriben sobre gnosticismo–gente como Elaine Pagels o Hans Jonas, a los cuales por cierto diré que guardo un alto respeto–tienen antecedentes cristianos o judeo-cristianos, y suelen ver el material gnóstico como formas antiguas de los evangelios bíblicos: de ahí el término "evangelios gnósticos". Esto para mí es un error, dado que cuando se examinan estos textos puede observarse que tratan temáticas muy diferentes.
Es por eso por lo que intento evitar el término "Gnosticismo", dado que este "-ismo" es un constructo académico: realmente ni siquiera existe un consenso en la academia sobre el significado de la palabra Gnosis. Mi intención no es la de entender como se originó el Cristianismo. Lo que hago es ahondar selectivamente en este material con la intención de extraer de él elementos particulares que son pre-cristianos, no-cristianos y hasta cierto punto, anti-cristianos–y hay de hecho una cantidad bastante considerable de elementos anti-cristianos en los códices de Nag Hammadi, una impresión que no te llevas si lees por ejemplo los libros de Elaine Pagels. 
Después de todo, recordemos que los primeros Gnósticos eran considerados como herejes por los primeros Cristianos. Si uno examina objetivamente el registro histórico, debe admitir que la campaña de supresión y erradicación hacia los Gnósticos fue única en la humanidad, y  masiva. Cabe preguntarse entonces: si el material gnóstico era simplemente una forma antigua de Cristianismo, ¿por qué fueron vistos entonces como una amenaza? Eso es lo que intento demostrar: que hay una considerable cantidad de mensajes no-cristianos, paganos, en esas escrituras.
MK: ¿Puedes hablarnos un poco más sobre tu método a la hora de extraer estos mensajes?
JLL: El material superviviente está en lenguaje cóptico, el cual según mi opinión no es un lenguaje propiamente dicho, sino más bien una forma de escritura usada para sintetizar los jeroglíficos egipcios inventada en el siglo 8 dC–un tiempo en el que la gente que sabía interpretar estos jeroglíficos comenzaba a escasear. Es un lenguaje árido, inadecuado para expresar ideas filosóficas o cosmológicas: y sin embargo, es el lenguaje en el que se hayan escritas la mayoría de las enseñanzas gnósticas, lo cual implica que incluso las traducciones al inglés son prácticamente ilegibles. 
Así que lo que obtenemos es una gran montón de piezas de LEGO, fragmentos que además son contradictorias entre sí, dado que algunas son mensajes cristianos y otras paganos. Y este es el material con el que tratamos todos los investigadores, académicos o no. Por supuesto, todos nos vemos obligados a escarbar entre las piezas, seleccionar unas cuantas y ensamblar una figura: y así, al final del día, cada uno acaba con una figura distinta. La diferencia quizá estribe en que yo admito abiertamente que mi lectura se construye a partir de prejuicios–conté esto en una entrevista en la radio y a la presentadora casi le da un ataque al corazón: después me dijo que era la cosa más honesta que se había dicho en su programa.
Por ejemplo, Elaine Pagels dice que su texto favorito es el Evangelio de Felipe, y lo presenta como un compendio de enseñanzas Zen supuestamente emitidas por Jesús, y por tanto lo presenta como de una forma afín al Cristianismo–lo cual se corresponde con sus antecedentes cristianos. Sin embargo, seleccionando otras piezas, podemos obtener una figura que representa a Jesús y a María Magdalena  usando sexo sacramental y técnicas tántricas.
MK: ¿Quienes son, entonces, los gnósticos? 
JLL: Tengo problemas con la palabra "Gnóstico", algo que también tenían los propios Gnósticos. De hecho, los maestros de los Misterios no se llamaban a sí mismos gnostokoi. Este término es de hecho un mote que se les ponía, y que viene a significar "sabelotodos": es de hecho un insulto. Los Gnosticos se llamaban a sí mismos "Telestai", que significa "aquellos que siguen una dirección". Su meta era la educación y la guía de la humanidad de acuerdo con su auténtico potencial interior. Ningún académico estará de acuerdo conmigo aquí, por supuesto. 
En mi sitio web explico que los Telestai del período Helenístico, los iniciados en las Escuelas de Misterios, descendían de adeptos chamánicos de la Orden de los Magi, originada en Persia alrededor del año 6000 aC. La Gnosis sería un camino chamánico de percepción aumentada: curiosamente, hay varios puntos en común con la "nueva brujería" de Carlos Castaneda y estos paralelismos pueden ser verificados textualmente. Así, la Gnosis depreda a la Tradición Hermética Occidental.  Existe una actualidad una ligera tendencia a ver en la Gnosis una forma perenne de sofisticado chamanismo. A partir de las "técnicas arcáicas del éxtasis"–el famoso término acuñado por Mircea Eliade–, los sabios Magi desarrollaron técnicas avanzadas de éxtasis que transmitían en las Escuelas de Misterios. 
La evidencia textual indica que los Gnósticos eran parapsicólogos, gente que comprendía los mecanismos profundos de la mente humana. Eran intermediarios entre los secretos de la naturaleza y la cultura humana. Eran chamanes urbanos, gente que practicaba con elementos de las tradiciones indígenas–que no eran urbanas–y que llevaban ese conocimiento a las ciudades, a las universidades. 

Virus Salvacionista

MK: ¿A qué aspectos de la religión cristiana se oponían entonces estos telestai? 
JLL: Lo que quiero dejar claro es que, aunque hay elementos anti-cristianos en el Gnosticismo, esto no quiere decir que los telestai se opusieran a un conjunto de valores que generalmente suelen aceptarse como cristianos: altruismo, amabilidad, compasión–las enseñanzas Gnósticas no se oponen a ninguno de estos principios éticos. Pero hay que distinguir entre principios éticos y principios ideológicos: estos eran los que cuestionaban los telestai.
Los telestai se oponían a un conjunto de ideas en las que se basan no solo el cristianismo, sino otras dos grandes religiones abrahámicas: judaísmo e islam–aunque estas tres tradiciones difieren en varios puntos, tienen en común el hecho de provenir del mismo patriarca bíblico: Abraham, quien probablemente fuese un personaje histórico que vivió alrededor del 850 aC. El núcleo de artículos de fe que comparten esta trinidad es lo que denomino el complejo-redentor, y que consta principalmente de cuatro componentes: 1) la creación del mundo por parte de un dios paternalista independientemente de una consorte femenina (él no es el mundo, sino que éste es un trabajo manual suyo); 2) el proceso de prueba y juicio (concebido como un drama histórico) de un conjunto de Gente Elegida; 3) la misión del hijo de Dios (el mesías) de guiar y salvar el mundo y 4) la llegada final de un juicio apocalíptico ejercido por sobre la humanidad por padre e hijo.
Lo que intento hacer definir la lucha entre dos paradigmas, dos formas de entender la experiencia espiritual de la humanidad: salvacionismo e iluminismo.  La aproximación salvacionista consiste en buscar la salvación en una entidad extraplanetaria, y desde el primer momento se basa en la asunción de que necesitamos ser rescatados. Esto implica que el ser humano es defectuoso, que no puede hacerse cargo de su comportamiento. Nuestros defectos–o nuestros pecados, si usamos el término católico–hacen que la salvación solo pueda encontrarse fuera de la condición humana, en la redención por parte de algo fuera del hombre.
Sin embargo, el iluminismo practicado por los telestai en las Escuelas de Misterios considera que el ser humano tiene el potencial para completar la iluminación en sus propias células. Por iluminación me refiero al acto de hacerse responsable de nuestro propio potencial, de desarrollarlo, y de convertirnos en seres creativos y compasionados en todo lo que hagamos.
MK: Y piensas que el salvacionismo es una especie de virus ideológico implantado en la mente de los seres humanos. ¿Qué tipo de patología produce este virus?
JLL: La metáfora del virus surgió en mi cabeza como algo evidente, pero lo gracioso es que a medida que avanzaba en mi investigación me dí cuenta de que otros autores que escribían sobre gnosticismo también la habían usado, como Philip K. Dick o Robert Einseman; incluso si volvemos la vista hacia la fiebre apocalíptica de los primeros tiempos del Cristianismo, veremos que se usaba una metáfora similar: la de la plaga.
La patología que creo que produce es lo que denomino el síndrome de maltratador/víctima. No creo que podamos situar toda la violencia dentro de la ideología cristiana: los seres humanos de por sí son capaces de ejercer la violencia y la opresión; sin embargo, cuando esta tendencia se ve legitimada por un gran sistema religioso, la violencia se vuelve de proporciones sobrehumanas. Y este es el tipo de violencia que se ha asociado con la religión Cristiana en los últimos 2000 años. 
La psicología ha desarrollado la noción del vínculo en el maltrato. Si hay un maltratador y gente que es maltratada, se forma un vínculo entre ellos, y algunos de los maltratados se vuelven ellos mismos maltratadores. Y mucha de la gente que ha sido maltratada sigue siendo albergando sentimientos de fidelidad y lealtad hacia sus maltratadores. Podemos ver esto en casos de familias en las que los niños han sido golpeados de forma atroz y que aún así siguen defendiendo a sus padres. Así que, examinando la historia desde el punto de vista del síndrome víctima/maltratador, creo que la ideología del salvacionismo sirve para que este juego siga funcionando.
Lee el Antiguo Testamento y mira como trata Jehová a sus hijos. Está continuamente castigándolos para después prometerles una recompensa mayor que a las otras naciones; pero esto no es más que un señuelo para mantener el vínculo del maltrato. Este vínculo es el que impulsa todos los instintos de dominación violenta en Europa durante la imposición del Cristianismo, y podemos ver como se extiende más tarde en todo el mundo: por ejemplo, con el genocidio sistemático de los nativos durante la conquista de América. Los Europeos no hicieron sino repetir el maltrato al que habían sido sometidos.   
MK: De hecho piensas que toda la ideología de las enseñanzas de Jesús como "no resistas al mal", "pon la otra mejilla", "ama a tus enemigos" o "haz el bien a aquellos que te odian" hace que este vínculo entre víctima y maltratador siga produciéndose.
Para mí es evidente. Da dos pasos atrás y examina esta ética: en primer lugar, favorece al maltratador: consiste en conferirle afecto a la vez que se acepta el maltrato. En segundo lugar, se trata de un mensaje muy desequilibrado porque se da a gente que han sido sujeta a la violencia. Si el mensaje de Jesús es tan Universal y profundo, ¿por qué no dice nada de los maltratadores? Lo único que hace este tipo de ética es proporcionar a las víctimas un falso sentido de superioridad moral. La reconciliación solo favorece al maltratador. 

Visión Sofiánica

MK: ¿Cual era entonces la alternativa ofrecida por estos telestai?
JLL: Pienso que la prespectiva de la vida de los sabios de las Escuelas de Misterios puede equipararse a lo que hoy en día está emergiendo en la Ecología Profunda, y a lo que yo denomino la Visión Sofiánica. Es una forma de entender la Tierra como una presencia divina, un conocimiento que se deriva de conectar con ella en éxtasis, de forma no-dual: esto es, ser conscientes de que somos parte de la vida celular y de la consciencia del planeta, que no existe separación entre ella y nosotros. Pienso que la Ecología Profunda nos está llevando de vuelta a Sofía, la diosa de la sabiduría y de los Misterios Paganos que fueron masacrados durante el surgimiento del Cristianismo.
Los valores que defiende la Visión Sofiánica son aquellos que las principales religiones del planeta–y que rigen el comportamiento de la mayoría de habitantes del planeta–descartan: adoración de todas las especies, reverencia ante la presencia sagrada de la Tierra, dependencia de la Naturaleza a la hora de enseñarnos como vivir, la divinidad de la inteligencia, el cuerpo como intrumento de la iluminación, el reconocimiento del valor intrínseco de la vida no-humana, aprendizaje enteogénico, énfasis en la belleza y en la sanación, éxtasis, co-evolución, potencial humano, sobriedad, ternura, juego y amor personal como fuerza religiosa de derecho propio. 
MK: ¿Qué diferencia hay entre la Ecología y la Ecología Profunda? 
JL: La Ecología Profunda afima que la tierra, el cielo, los árboles, los animales, los microbios y las plantas tienen un valor intrínseco aparte de nosotros, y aparte del uso que les demos. En la Ecología se piensa: vamos a cuidar de la naturaleza porque la necesitamos para sobrevivir. Y esta es una actitud muy sana, pero no es la misma que la actitud espiritual que representa la Ecología Profunda. Pienso que la Ecología Profunda es más compatible con la visión de los antiguos Misterios. Es un espíritu de humildad: nunca diría que "debemos salvar el planeta", me parece muy arrogante. No vamos a salvar el planeta: lo que debemos hacer es corregirnos a nosotros mismos de forma en que podamos vivir con el planeta–de forma que el planeta nos cure. 
MK: ¿Como puede sanarnos el planeta?
JLL: La sabiduría indígena ofrece dos factores claves que necesitamos tanto para nuestro supervivencia física como moral. Una de ellas es la habilidad de aprender del contacto directo con el mundo natural. Aprender de la tierra, de los animales, de los árboles y del cielo. La segunda clave es el entusiasmo, el éxtasis y la conexión con la fuerza vitál de la Tierra. Hemos perdido ese éxtasis y nuestra habilidad para aprender de la Tierra, y esto no ha sido un proceso natural: han hecho falta 2000 años para arrebatárnoslo. No es sorprendente que encontremos el mundo de hoy lleno de personas deprimidas, perdidas y consumiendo píldoras antidepresivas. La única cosa que puede salvarnos del abismo de soledad y depresión es nuestra conexión con la divinidad de la misma Tierra. Pienso que nos hallamos en un umbral en el que estas cosas pueden ser comprendidas y recuperadas.

Narrativa Maestra

MK: Piensas que el Mito de Sofía conservado por estos telestai puede servir como una Narrativa Maestra en este proceso, y de hecho lo consideras un mito sanador ¿Por qué?
JLL: Creo que de hay numerosos mitos que, cuando se introducen en nuestra vida, tienen un efecto curativo–y yo de hecho he experimentado este efecto con muchos de ellos; suelo recurrir al ejemplo de la Mujer Búfalo Blanca, de los Nativos Americanos. Así que no quisiera dar la impresión de que desprecio y dejo de lado todo esto para imponer una Maestra Narrativa.
Sin embargo, como digo, sitúo al Mito de Sofía en una categoría especial. Dicho de forma rápida, es un mito planetario; no es un mito bio-regional o racial–de los cuales hay muchos y muy válidos–sino que es mito unificador a nivel planetario. En mi experiencia en el campo de la Mitología Comparativa, siguiendo las escuelas de Mircea EliadeJoseph CampbellMarija Gimbutas oJoseph Frazer, no he sido capaz de encontrar en ninguna cultura del mundo ningún mito de estas características.
Como he apuntado, el mensaje de los telestai tiene que ver con lo que hoy en día se conoce con la teoría de Gaia. En el mito de la creación que se transmitía en los Misterios, la tierra es una metamorfosis de una divinidad cósmica llamada Sofía, cuyo nombre significa sabiduría. El planeta que habitamos es el cuerpo disfrazado de esa Diosa. El propósito de esta historia era explicarnos quien era Gaia antes de convertirse en la Tierra.
MK: ¿Puedes contarnos brevemente el Mito de sofía?
JLL: La historia cuenta que, al principio, cuando los mundos infinitos existían–y no ha habido nunca un momento en que no hayan existido, no hay un momento inicial de la creación, ni un big Bang–ocurre que en una de entre toda la miríada de galaxias existentes se produce una singularidad. Esta galaxia es la nuestra, la Vía Láctea, y los telestai llaman a este acontecimiento la monogenis. Estas singularidades surgen desde las profundidades de las galaxias periódicamente, como una ola, y se extiende por toda ellas. El juego de la creación consiste en observar como se manifestará esta singularidad, qué forma tomará.
Cuando esta singularidad emergió, fue recibida como puro potencial, como una bella nota musical. Esta era una nota sin forma, una masa de sonido puro, y así fue recibida por los dioses que habitaban en el centro de la galaxia–lo que las enseñanzas gnosticas llaman Aeones. Así que el Gnosticismo es a la vez un sistema monoteísta en cuanto a que reconoce un poder supremo originante, pero a la vez politeísta, en cuanto a que reconoce a estas divinidades múltiples, los Aeones.
Y estos Aeones–los cuales describo como grandes torrentes luminosos–bailaron y acogieron esta singularidad en su esencia, y bailando le dieron forma; esto es una de las cosas que ellos hacen en el centro galáctico, el cual está vivo y despierto. Así que llegó el momento de hacer que la singularidad se desplazase hacia los brazos de la galaxia–en donde originarían mundos de acuerdo con las posibilidades con las que los Aeones la habían configurado–y acudieron estasdos  divinidades las que se dispusieron a llevar a cabo tal tarea: el Aeón Sofía y el Aeón Cristos. Así puedes creer que los padres de la humanidad, de alguna forma, son estos dos Aeones–lo cual coincide con numerosos mitos en los que las divinidades creadoras son gemelos o una pareja.
Así que estos dos Aeones tomaron esta singularidad–una compleja espora genómica llamada el Anthropos por los telestai, de la cual la humanidad sería una manifestación–y la implantaron en los brazos de la galaxia. Este hubiera sido el curso normal de los eventos para los Aeones, pero sucede una cosa: el Aeón Sofía, que observa el curso de los eventos, empieza a sentirse fascinada por el progreso humano y empieza a involucrarse emocionalmente con esta novedad que es la humanidad. Y entonces es cuando ella cae del Pleroma, del centro Galáctico. Este es el momento clave de la cosmología gnóstica: la Caída de Sofía. Y así tenemos que no es la humanidad la que ha caído, la que es imperfecta y debe ser asistida por los dioses, sino que es la propia divinidad la que ha caído. Es entonces nuestro rol el de ser empáticos con ella, porque su destino está íntimamente ligado al nuestro: la razón por la que cayó fue su fascinación por nosotros.
  
MK: Y entonces Sofía se transforma en la Tierra, en donde la humanidad arraiga y se desarrolla. De hecho has encontrado paralelismos entre la teoría de Gaia de James Lovelock y el mito de Sofía que has extraído de los códices de Nag Hammadi. ¿Cuales son?
JLL: El primero sería el concepto de autopóyesis; entendemos que Gaia se auto-organiza y se autorregula, y puedes encontrar básicamente el mismo concepto cuando los gnósticos narran la metamorfosis de Sofía en la Tierra. El segundo tiene que ver con las anomalías de la biosfera–como el equilibrio entre el Sol y la temperatura de la atmósfera que sirvieron a Lovelock–para enunciar la Teoría de Gaia y que se repiten en los materiales gnósticos. El tercero tiene que ver con un concepto controvertido en biología: la abiogénesis, que viene a significar que la vida orgánica está basada en la actividad inorgánica; y esto se relaciona con la concepción gnóstica de que la vida orgánica está íntimamente relacionada con el reino de los seres inorgánicos: los arcontes. 

Arcontes

MK: Y aquí llegamos a uno de los temas más populares en el mundo de lo bizarro. ¿Quienes son los arcontes?
JLL: Esto tiene que ver con la Caída de Sofía: hemos dicho que el hecho de que Sofía se introduzca en la galaxia es una anomalía, que tiene efectos colaterales. La caída de Sofía en la materia subatómica produce una reacción catalítica y catastrófica, un evento prematuro, que genera una especie de seres inorgánicos: los arcontes. Los arcontes forman un enjambre alrededor de ella, son seres de comportamiento insectívoro, y los materiales gnósticos describen explícita y claramente dos tipos: seres embriónicos que se asemejan a un feto prematuro y un tipo dracónico, reptiliano, que maneja a los embriónicos.
Así que, antes de que Sofía se transforme en la Tierra, los arcontes se organizan en su propio mundo; y el mundo que crean es el sistema planetario en el que habitamos–excluyendo al Sol, la Tierra y la Luna. Lo que sucede es que Sofía forma una relación simbiótica con el Sol y se convierte en la Tierra que está, de hecho, atrapada en este sistema que han construido los mecánicos, los arquitectos: los arcontes.
Es una historia ciertamente bizarra–ha sido calificada como una teología de ciencia ficción–y encierra un enigma: el de la depredación. Es un tema que se  repite por ejemplo en los libros de Carlos Castaneda: Don Juan lo llamaba "el tema de temas". Y esto es parte del plan de Gaia: la depredación es una relación simbiótica, y de hecho si estamos aquí es porque somos depredadores. Sin embargo hay una diferencia entre depredación y perpetración; mientras que hemos definido la depredación como algo necesario y que rige la vida en este planeta–nos hallamos todos en una cadena de comida–, la perpetración se diferencia de ésta en una invasión de límites y un exceso de intrusión.
El problema que se hace patente en las escrituras gnósticas es que el señor de los arcontes–el Demiurgo, Yaldabaoth, Yahveh, Jehová–no se mantiene en el lugar que le corresponde. 
MK: ¿Dices entonces que relacionas a estos arcontes con los voladores descritos en los libros de Carlos Castaneda?
JLL: Si, antes he señalado una serie de correlaciones entre ambas versiones que puede consultarse en mi sitio web. Fue liberador darme cuenta de que las experiencies de ataques psíquicos que había vivido desde pequeño por estas entidades no eran producto de mi fantasía: eran una experiencia que se halla respaldada por otras fuentes, incluyendo algunas muy antiguas.
MK: ¿Crees que los arcontes pueden tomar una forma orgánica para existir? ¿Piensas que arcontes y grises son lo mismo?
JLL: Según mi entendimiento, los arcontes son una especie inorgánica; quizá de mercurio y silicio, como sugiere Nigel Kerner. Los Grises son cyborgs, con una forma parecida a la humana. Los textos gnósticos describen el génesis de los arcontes como un aborto, y de ahí su forma de un cuerpo humano prematuro. Los arcontes son solo cuerpo, carecen de alma, y sí: creo que los grises son los equivalentes del tipo de arcontes embriónicos. Whitley Strieber observa que los grises suelen exhibir un alto grado de neotenia–esto es, la forma de una entidad que no se ha formado del todo al nacer.
Una de sus metas principales es la de convencernos de que ellos nos crearon–de hecho ellos piensan que nos crearon–pero esto no es así; son inferiores a nosotros en cuanto a voluntad e inteligencia, aunque superiores en tecnología, telepatía y técnicas de simulación.
MK: Si el tipo embriogénico de arcontes se corresponde con los grises, entonces el tipo draconiano se corresponde con los infames reptilianos. ¿Qué piensas de autores como David Icke o el chamán zulú Credo Mutwa, que creen de hecho que estos reptilianos pueden invadir el cuerpo de por ejemplo George Bush?
JLL: Pienso que debemos entrenar nuestra imaginación para detectar la presencia de entidades alienígenas, y distinguir lo que es real de lo que es una fantasía. Los alquimistas tenían una regla: proceder de acuerdo con la naturaleza, observando el funcionamiento de la misma y llevar a cabo la Gran Obra con los verdaderos poderes de la imaginación, no con pensamiento fantástico. Esta es una cuestión de disciplina que hay que enfrentar en el camino de las percepciones aumentadas. Pienso que algunas fuentes indígenas como Credo Mutwa tienen cosas válidas que decir acerca de los arcontes. Al mismo tiempo, sospecho que el escenario reptiliano ha estallado de forma desproporcionada debido al pensamiento fantástico y la manipulación mental.
Debe mantenerse un elemento de sentido común cuando se investigan fenómenos paranormales y sobrenaturales. George Bush no tiene por qué ser un reptiliano para ser un monstruo. Debemos reconocer que los seres humanos pueden comportarse como monstruos porque han sido desviados por los predadores reptilianos. En mi opinión, el escenario propuesto por Icke y otros da demasiado poder a los reptilianos. ¿Como pueden ofrecer Icke y sus testigos ofrecer evidencia de primera mano de metamorfosis reptilianas? Bien, la percepción es un constructo. Toda la percepción. Consideremos que los Arcontes son maestros de la realidad virtual. En cóptico esto se llama HAL, simulación. Los textos gnósticos dicen que los arcontes "abducen almas durante la noche". Esto se hace mediante técnicas de Realidad Virtual. Por supuesto, la Realidad Virtual de los Arcontes es tan real para ellos como lo es para nosotros la Tierra. La diferencia es que nosotros no podemos interactuar simbióticamente con la Realidad Virtual. La otra diferencia es que los Arcontes manipulan los campos inorgánicos cuánticos, pero que nosotros manipulamos las bandas perceptuales que dan forma a esos campos. Los telestai enseñaban que somos superiores a los Arcontes en cuestión de pensamiento, percepción e intención.
Yo diría que esos informes son existencialmente verdaderos: los testigos han percibido la metamorfosis en reptilianos, pero esta percepción tiene más que ver con una manipulación en la percepción del testigo por medio de las técnicas de RV reptilianas más que un suceso genuino de la naturaleza.
MK: David Icke y otros teóricos de la conspiración piensan que los rituales satánicos se originan en las Escuelas de Misterio, que estas son la raíz de los Illuminati y la tradición Masónica. ¿Como llegan estos autores a la relación entre Iluminismo, Escuelas de Misterio y Satanismo? 
JLL: Estos teóricos no están familiarizados con las técnicas impartidas en las Escuelas de Misterio, y no distinguen entre los métodos utilizados por los Illuminati de los utilizados por Gnósticos genuinos. Los Illuminati eran iniciados trastornados, conocedores de las prácticas de los Misterios pero ansiosos de poder social y político. Las Escuelas de Misterio no eran campos de entrenamiento de Illuminatis, como cree Icke: este es un grave error por su parte. Debido a la falta de experiencia directa, Icke y los otros son incapaces de darse cuenta de que los adeptos al Poder de la Serpiente (Kundalini) se oponen directamente a la facción de los Illuminati que había pactado con los poderes reptilianos. Como he explicado en mi sitio web, es la Kundalini la que repele la intrusión alienígena.
A través de la historia, el dragón ha sido visto como una fuerza benigna, incluso un tipo superior de consciencia. Pero el arconte del tipo draconiano que describen los Gnósticos es diferente. Debemos emplear bien la imaginación para distinguir el arquetipo universal de dragón de la forma arcóntica.
MK: De hecho defiendes que los arcontes también se mueven en los espacios de la imaginación, los mundos imaginales.
JLL: Si; los telestai pensaban los Arcontes eran una raza extraterrestre, pero a la vez mantenían una doble visión al respecto: para ellos, lo realmente significante no es que los arcontes existieran como una especie de cyborgs, sino el hecho de que tienen la habilidad de penetrar en nuestras mentes y habitarlas. Así que en el análisis final, la noción de que los arcontes sean o no una especie extraterrestre deja de ser relevante. Lo relevante sería: ¿hay programas, sistemas de creencias operando en nuestras mentes de forma autónoma? Quizá no exista una diferencia entre un sistema de creencias y un Arconte: quizá el Arconte sea la personificación de ese sistema de creencias. 
Ciertamente hacen falta grandes dosis de sobriedad a la hora de manejar este tipo de material. Los arcontes influyen en la forma que tenemos de ver el mundo, no en el mundo directamente. 

Jesús y María Magdalena

MK: ¿En qué lugar dejan pues las enseñanzas gnósticas a las figuras de Jesús y María Magdalena? ¿Qué opinas del Código DaVinci?
JLL: Tengo una opinión positiva del Código DaVinci en cuanto a que introduce  el principio femenino. Uno de los principios básicos del ecofeminismo es que el modo en que nuestra especie trata a las mujeres está íntimamente relacionado con el modo en que tratamos a la naturaleza. Así que creo que la novela de Dan Brown ha hecho un servicio muy grande, no tengo duda de ello. Sin embargo, si uno se refiere a los textos gnósticos no hay ninguna referencia al hecho de que Jesús y María Magdalena estuvieran casados o que tuviesen hijos. De hecho, los textos gnósticos están en contra de la procreación.
Si tuviera que elegir una historia para esta pareja, pensaría más en ellos como componentes de una célula de las Escuelas de Misterio: quizá una pareja conectada por prácticas tántrica–y hay algunos textos que podrían apuntar a esta posibilidad–que se dedicaba a enseñar la Visión Sofiánica pagana.
MK: Esto es sin embargo una suposición, porque realmente te opones a la figura de Jesús.
JLL: Puedo admitir la posibilidad de que podría haber existido un Jesús como el que acabo de describir, como un telestai. Sin embargo, de ningún modo puedo identificar esta figura con la que aparece en los evangelios, ni creer que nada de lo que se dice en ellos represente las enseñanzas de un telestai o los remanentes de estas enseñanzas. Ambos escenarios son incompatibles y llevan implícitos sistemas de creencias opuestas.
Jesús ha sido considerado como curandero de fe hippie, un rabino radical, un maestro esenio, un yogui de Kashmir, un pretendiente del trono de Israel, un terrorista sadúceo, el mesías que esperaban los judíos, un mago o un falso gurú que usurpó el rol de Juan el Bautista, un iniciado Gnóstico, un místico Judío, un extraterrestre de Venus o la encarnación terrestre de la divinidad. 
Si tuviera que quedarme con una de estas es la de un líder mesiánico de la que luchaba contra la ocupación Romana en la secta de los sadúceos, el cual era un movimiento apocalíptico y genofóbico. La razón para elegir este perfil es que es el que surge como más probable cuando se comparan las evidencias históricas y los textos evangélicos. Y no estoy solo en esto, sino que sigo a gente como Robert Eisenam–quien hizo énfasis en considerar los textos evangélicos como propaganda política–o John Allegro.
Creo que los verdaderos mesías–si es que tal cosa existe–son aquellos que traen un mensaje sobre el verdadero potencial humano, y no un mensaje de redención extraplanetaria. Los telestai llevaban a cabo esta misión de forma anónima, y desde luego no esperaban que la humanidad los pusiera en un pedestal por ello.
MK: ¿Que opinión tienes entonces acerca de María Magdalena?
JLL: Yo diría que es la musa de la humanidad; es un nombre que hemos asignado al anima, algo que vive en los corazones de hombres y mujeres, una fuerza que nos nutre y que nos guía. Es una figura que si se acepta de forma íntima se vuelve una parte importante de nuestra vida psíquica y espiritual: un reflejo–no una encarnación–de Sofía. Sí, los telestai pensaban que teníamos una chispa divina en nuestro interior: pero esta era una facultad–nuestra inteligencia–y no una entidad.
MK: ¿Crees que la pareja de María Magdalena y Jesús pueden servir como modelo en la actualidad?
JLL: Yo diría que pueden servir como modelo de un pareja no convencional, con relaciones de género equilibradas, quienes no están definitivamente por la labor de tener hijos y que no mantienen una relación de exclusión romántica o de auto-glorificación, sino que tienen en el punto de mira un tercer punto: la definición de la humanidad. No los padres de la humanidad, sino sus reveladores.

Gnosticismo Pop

MK: Parece que hay un resurgimiento de temas gnósticos en la cultura popular. ¿Qué criterios usarías para discernir si una historia se atiene genuinamente a las enseñanzas gnósticas?
JLL: La imágen que la cultura popular presenta de las enseñanzas gnósticas debe ser evaluada cuidadosamente. Por ejemplo, el libro de Erik Davis, "Techgnosis", es un libro brillante, pero repite la desinformación típica sobre las enseñanzas gnósticas–que el mundo fue creado por un demiurgo maligno, que odiaban lo material, que rechazaban el cuerpo físico, etc. Tengo la impresión de que las enseñanzas gnósticas serán absorbidas rápidamente por la cultura popular y consecuentemente pervertidas.
Me muestro bastante cauteloso sobre la adopción de las enseñanzas gnósticas en la cultura popular, especialmente entre las comunidades cibernéticas y ciberpunk. Gnosis es el conocimiento extático del milagroso funcionamiento simbiótico de la inteligencia Gaiana, pero, como dice Dale Pendell, "las flores no crecen en el ciberespacio". Por ejemplo, en la trilogía de "The Matrix" hay importantes elementos gnósticos. Estas películas reflejan la enseñanza gnóstica de que el mundo que habitamos–no el mundo natural–es como un sistema carcelario dirigido por fuerzas hostiles. Pero el mensaje final trata sobre la creencia. De hecho, la tercera película acaba con una encendida aprobación de la creencia. Las creencias tienen poco o nada que ver con salirse de la matriz de condicionamiento humana, pero tiene mucho que ver con lo que nos mantiene dentro de la matriz del condicionamiento humano. Los rebeldes de la película creían en Neo, y le apoyan a la hora de desafiar a la Matriz, pero fue el conocimiento lo que realmente les libera. Lo que Neo sabía sobre sí mismo, sobre sus poderes y sobre las simulaciones de la Matriz es lo que le permite derrotarla. Creer los unos en los otros es esencial, ¿pero que es lo que hay en los otros que hace esta creencia válida? Las creencias no crean nada, sino que actúa como un filtro sobre todo lo que podemos imaginar o crear. Es el conocimiento lo que libera–este es el mensaje gnóstico esencial.
Diría que la simulación arcóntica se está desarrollando ahora a través de la tecnología Realidad Virtual, la extensión de los videojuegos. Aquellos que producen estas tecnologías están contribuyendo a la alienación de nuestro mundo, de nuestro hábitat natural y a la pérdida de nuestro sentido de la humanidad. Diría que los arcontes han migrado al ciberespacio, y este es de hecho el medio a través del cual pueden acceder a la mente humana. La amenaza central del escenario OVNI/ET no es la invasión de la tierra por poderes alienígenas, sino la traición de la humanidad hacia la propia humanidad.
MK: ¿Qué opinas de algunas iglesias gnósticas emergentes?
JLL: Me parece dificil imaginar como un movimiento religioso pudiera ser compatible con la experiencia gnóstica genuina. Esta es anti-autoritaria y anti-institucional. La Gnosis, como se mantuvo durante siglos, no solo no era una religión, sino que era una anti-religión. La espiritualidad gnóstica  es elitista en el mismo sentido que el tenis profesional. A nadie se le prohibe jugar al tenis o alcanzar un estatus profesional, pero en realidad poca gente tiene la capacidad y la determinación de llegar a ese estatus.
La evangelización es totalmente ajena a la Gnosis. La Gnosis solo puede extenderse de persona a persona, a través de compartir íntimamente algunas experiencias como la muerte del ego, el éxtasis, el conocimiento silencioso y la devoción sacramental hacia la Tierra. La religión es una trampa. La Fe es un sistema fantasioso. No interactúo con gente en comunidades religiosas: yo les doy pena y ellos me sacan de quicio. No predico la religión gnóstica: enseño la Visión Sofiánica.

Despedida y cierre

MK: ¿Podrías dirigirnos unas últimas palabras a modo de conclusión? (en serio mira ke me siento tonto preguntándole a una pantalla, oyes)
JLL: Los científicos dicen que estamos entrando en la sexta extinción, y pienso que en ese proceso Gaia seleccionará a las especies que la complazcan. Creo que la visión científica de Gaia no será suficiente para nuestra supervivencia: como mitólogo, creo que necesitamos narrativas que nos hagan partícipes–y no meros pensadores–del proceso de co-creación con Gaia, del proceso de correción de Sofía.
La corrección de Sofía significa dos cosas. La primera, ser conscientes de que en su consciencia planetaria–el planeta en que habitamos–Sofía quiere reconectar con el Pleroma, lo que implica que existe implícito un proceso cósmico. La segunda es que la humanidad se haya implicada en esta corrección–que sofía lleva a cabo esta conexión con y a través de la raza humana. No creo que ella dependa de nosotros, pero de alguna manera espera algo de nosotros. Creo que la humanidad necesita núcleo de nuevos sabios, místicos o chamanes que reconecten con la sabiduría de Sofía de forma sobria y clara. 
A la vez pienso que cada ser humano está íntimamente relacionado con la Diosa, y que si poniéndonos en contacto con la autoridad erótica de la naturaleza dejaremos de inclinarnos hacia el gobierno de los controladores, y dejaremos paso al gobierno del cuerpo, de la belleza, de los sentidos y de la sublime sabiduría de este planeta en que vivimos. Los gobiernos arcónticos nos envidian: ellos se aburren, nosotros lo pasamos bien. Esta bella anarquía es la solución para la armonía en nuestro planeta. 


3 comentarios:

  1. Cómo hacemos para que podemos parar esta tiranía sobre el planeta? me refiero a las fumigaciones con aluminio, estroncio y barío. Nos lo vamos también s tragar como todo lo malo que nos hace el PASTOR PODER??

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  2. Apreciada María Remedios:

    "Ellos" hacen lo que se les da la gana porque gozan del poder y del dinero... A nosotros nos queda como armas el Conocimiento, la Palabra y nuestro poder de "auto-inmunización"... pero el mayor poder sería la UNIÓN QUE HACE LA FUERZA ENTRE TODOS LOS PUEBLOS DEL MUNDO...
    La cuestión es que una gran parte de la población aún desconoce esta problemática y otros que por apatía, indiferencia y/o narcotización, no hacen ni quieren tomar parte activa de este problema que a todos nos aqueja...
    Esperemos y no tengamos que llegar hasta el borde del abismo para reaccionar en cadena...

    Fraternal saludo...
    Gloria H.

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  3. I was first taken back to the primordial beginning before creation and there experienced human evolution in the context of a larger cosmic agenda. Suddenly I was overwhelmed by the most extraordinary Love, a love unlike anything I had ever encountered before. It was a romantic love, cosmic in scope and intensity. As I stabilized under this amorous assault, I began to remember from deep within my story. An ancient love, a divine love of unbelievable proportions. I was a Cosmic Being being loved by another Cosmic Being. Though at one level I had never been separated from my Lover, at another level we had been separated for billions of years, and my return was rekindling our ancient love. The pieces were hard to catch. Creation seemed to be a reality that had come forth from the dynamic relation between two Cosmic Beings, which had themselves emerged from a more fundamental Primal Unity. One Being,who felt more like a He, had remained fully conscious outside of matter while the other had plunged Herself into the task of creating the material dimension, knowing in advance that She would lose Her self-awareness in this work and become unconscious of Her true reality for billions of years. She had voluntarily submitted to this long and painful exile in order to create the raw substance of physical life that would in time become transparent to divine intention as matter evolved into full self-awareness. This work now largely complete, the self-imposed exile was coming to an end, and the Lovers were being reunited at long last....

    Christopher Bache, "Dark Night, Early Dawn: Steps To A Deep Ecology of Mind"

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