Llevo días sin escribir porque ando saturado de conceptos por integrar, digerir y procesar en mi propio camino de crecimiento. Siempre llegan sincronísticamente cosas a medida que uno va tirando hacia delante, y hay periodos en los que, como tengas ganas de “pedir” que te “den un poco de caña”, más que pequeñas “dosis” te llegan toneladas de información. Llevo meses trabajando en mi cuarto libro y hay un par de capítulos sobre el libre albedrío que tienen que ver mucho con la “lucha” diaria en las lecturas de registros akashicos por
expulsar a entidades negativas acopladas a muchos de nosotros, de las cuales he hablado en un montón de artículos en el blog.
Muchas veces el solo hecho de
“crear conciencia” al respecto en la gente ya ayuda, así que me siguen viniendo intuiciones para que siga escribiendo sobre el tema desde nuevos ángulos.
Personas “manipuladas” por entidades negativas
Uno de los bloqueos que salen de vez en cuando en las lecturas son los llamados
“pactos” y “ataduras”, que básicamente significa que hemos “acordado” con entidades negativas dejarnos “anclar” a cambio de cualquier cosa. Cuando una entidad ha conseguido “convencer” a una persona para
obtener su “energía”, esta persona entra a formar parte de la pirámide jerárquica a través de la cual la energía negativa es consumida y absorbida hacia niveles cada vez más altos
(lo expliqué en esta entrada), estando en la punta de esta pirámide de densidades superiores aquellas entidades, sucesivamente graduadas de todos los niveles inferiores, que han persistido en el camino de
servicio a uno mismo, a través del cual buscan volver a la
“Fuente” dando por hecho que la forma de hacerlo es la asimilación en si mismos del resto de
conciencias y entidades.